ASÍ SON LOS SMART PORTS Y ASÍ BENEFICIAN AL SECTOR LOGÍSTICO
Las necesidades portuarias en materia de digitalización, descarbonización y conectividad son cada vez mayores. los puertos lo están teniendo en cuenta y se están convirtiendo en los denominados ‘smart ports’.
Los puertos inteligentes o smart ports son aquellos que apuestan por aprovechar el uso de la tecnología para mejorar y modernizar el transporte marítimo de mercancías y los transportes públicos. Estos puertos se caracterizan por buscar la mayor eficiencia para satisfacer las necesidades de los clientes y usuarios. Las necesidades portuarias en materia de digitalización, descarbonización y conectividad son cada vez mayores y es preciso invertir en su modernización y eficiencia para seguir manteniéndose a la vanguardia del sector, además de ofrecer el mejor servicio a sus clientes y aspirar a captar nuevos tráficos.
Un paso hacia estos puertos inteligentes es su conectividad eléctrica. Por ejemplo, los sistemas OPS para proporcionar electricidad a los buques cuando están atracados se han convertido en una de las principales herramientas de los puertos para reducir su impacto medioambiental. La intención es que los puertos del país estén preparados para suministrar energía eléctrica a los barcos antes de 2030. La Autoridad Portuaria de Barcelona, por ejemplo, tiene en macha el proyecto Nexigen, que prevé unas inversiones iniciales de más de 130 millones y hará posible que los barcos se conecten a la red eléctrica general una vez hayan atracado, utilizando energía limpia y 100% renovable. La electrificación ha de proporcionar una base más flexible y adaptable para futuros desarrollos tecnológicos, como la integración de sistemas de gestión inteligente de energía y la implementación de fuentes de energía renovable complementarias, como los paneles solares o las turbinas eólicas.
Más allá de la electrificación y sus ventajas para reducir las emisiones contaminantes y acústicas mientras los buque se encuentran en puerto, las Autoridades Portuarias están involucrándose en múltiples proyectos para tratar de integrar novedosas tecnologías que pueden ayudarles a mejorar su eficiencia y seguridad. Así, el puerto de Valencia se ha convertido en el primer y único recinto europeo y del mundo en utilizar en operativa real una Reach-Stacker o apiladora capaz de mover contenedores de más de 30 toneladas usando el hidrógeno como combustible. Junto a este proyecto, el puerto tiene otros dos pilotos desarrollados en el marco del proyecto H2ports para el uso de este combustible limpio, como la cabeza tractora 4×4 propulsada por hidrógeno y la estación móvil de suministro.
La Autoridad Portuaria de Barcelona, además, está desarrollando un proyecto piloto junto a Siport21 y la Universidad Politeécnica de Cataluña – BarcelonaTech que emplea Inteligencia Artificial y ‘Machine Learning’ para la gestión del tráfico marítimo, así como para mejorar la operativa y la seguridad en la operativa de carga y descarga. También pretende modernizar, mejorar y agilizar sus procesos de inspección mediante una aplicación móvil que automatice la captura de precintos y matrículas de contenedores y realice el seguimiento fotográfico de la inspección. La aplicación deberá integrarse con Sostrat para obtener la previsión diaria de operaciones de inspección y almacenar la información de precintos y fotografías. En este contexto, ya ha adjudicado el contrato para el suministro y servicio de mantenimiento de una solución tecnológica de gestión de inspecciones de contenedores basada en IA. Respecto al proyecto CircularPort, se ha creado un ecosistema blockchain para rastrear la ruta del residuo portuario más allá del propio puerto, siguiéndolo a través de la planta de reciclaje y conocer en qué se ha transformado este residuo.
Hay que mencionar también las iniciativas en marcha en algunos puertos en materia de sostenibilidad. Es el caso del de Algeciras, que acaba de renovar su certificación ambiental Ecoports PERS y trabaja en la puesta en marcha de la autopista ferroviaria Algeciras-Zaragoza. Además, ha encargado el cálculo y registro de su huella de carbono en los alcances 1, 2 y 3, y pretende realizar una recopilación documental para la inscripción en los registros públicos de huella de carbono estatal y autonómico.
En definitiva, los puertos españoles siguen dando pasos para convertirse en smart ports o puertos inteligentes, con el objetivo es optimizar cada aspecto de sus operaciones, desde la logística y la gestión del tráfico hasta la seguridad y el impacto ambiental.